El premio busca estimular, reconocer e incentivar el liderazgo, la trayectoria comprobada en actividades de CTI, así como la contribución y/o excelencia de la producción de CTI desarrollada por la mujer investigadora peruana. Conversamos con la Dra. Layla Hirsh, docente de la Sección Ingeniería Informática del Departamento de Ingeniería, para conocer más sobre el tema.
La postulación a este premio estuvo dirigida a profesionales en los siguientes campos: “Ciencias Formales”, “Ciencias Físicas”, “Ciencias de la Vida” y “Ciencias de la Ingeniería y tecnología”. Todo ello, con el objetivo de destacar los importantes aportes de las investigadoras vinculadas a dichas disciplinas. Asimismo, el premio estuvo divido en dos categorías importantes: Categoría A “Excelencia científica”, dirigida a investigadoras científicas con una amplia trayectoria, y Categoría B,“Talentos en ascenso”, dirigida a jóvenes científicas menores de 45 años. En la primera categoría, también participaron las docentes del Departamento de Ingeniería, la Dra. Suyeon Kim y la Dra. Fanny Casado. La Dra. Hirsh fue premiada en la categoría “Talentos en Ascenso”.
Para la profesora Hirsh, esta premiación representa una gran oportunidad para sus tesistas y su equipo de trabajo. “En realidad, yo veo esta premiación como algo muy bueno para mi equipo. Si bien es cierto que el premio me lo dan a mí, hay mucho trabajo detrás”. También, consideró que un punto importante en la obtención del premio ha sido el respaldo del consorcio de investigación en proteínas repetidas “REFRACT”, al que pertenece desde hace varios años. Asegura que el monto de dinero ayudará a su equipo, pero también los posicionará mejor ante la sociedad.
También, nos comentó que en este emprendimiento el apoyo de la universidad ha sido fundamental. “Me apoyaron con el financiamiento de la primera maestría que realicé y con la segunda maestría que estoy realizando actualmente. Además, la universidad me ha dado el valioso equipo de personas que tengo. Siento que no hubiera podido lograr estas metas sin el prestigio de la universidad”, acotó. De hecho, ella misma enfatiza que su vinculación con el laboratorio donde realizó su doctorado se consolidó gracias a que venía de la PUCP. Asimismo, aprovechó la oportunidad para agradecer al Departamento de Ingeniería por el apoyo brindado a nivel documentario y administrativo, en especial a los ingenieros. Rafael Aguilar y Juan Carlos Dextre, y al equipo que ha conformado, que facilita mucho el trabajo.
Por otra parte, recomendó a otras jóvenes investigadoras que nunca dejen de perseverar para conseguir sus metas a nivel académico. Y envió un mensaje: “Sí se puede”. Además, ella comentó: “No se trata de un premio, en mi caso disfruto mucho del tiempo que le dedico a la investigación. Yo me siento bien de trabajar con mis alumnas, cuando logro motivarlas me siento bien, me siento feliz, creo que ese trabajo no necesita de un reconocimiento especial”.
Finalmente, mencionó que considera importante que la labor de una investigadora deje una huella. “Aunque sea un pequeño impacto, un aporte. Eso es lo importante en nuestra labor”. También destacó la importancia de la independencia y el empoderamiento en las jóvenes científicas que empiezan a forjarse un camino en la academia. ¡Felicitaciones Dra. Layla Hirsh!
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