El año 2000, el famoso cambio del milenio (trauma por los relojes en las redes), marcó el despegue de las telecomunicaciones en nuestro país con el ingreso de una gran compañía europea: Telecom Italia (TIM) para competir con el grupo Telefónica. En el Perú, creció la telefonía fija inalámbrica y los servicios de larga distancia internacional se volvieron competitivos con el ingreso de varios operadores. Se realizaron esquemas de interconexión y los nuevos modelos de negocios obligaron a Telefónica a plantearse nuevos negocios.
A nivel internacional, en el 2001, la compañía DoCoMo lanzó comercialmente la telefonía móvil UMTS o de tercera generación en Europa y el Fondo de Servicio Universal (FITEL) publicó su primer proyecto piloto de extensión de cobertura con teléfonos públicos para zonas rurales (que se adjudicó a Avantec y a Gilat). Este mismo año, se publicaron las condiciones de uso de los servicios públicos de difusión y servicios de valor añadido para acceso a Internet. Es así como se dieron las condiciones para la creación de la Especialidad de Ingeniería de las Telecomunicaciones en la PUCP, el 24 de agosto del 2001. Nuestro recordado gran “Maestro”, Ing. Percy Fernández, afirmó con lucidez: “Jóvenes, no nos olvidemos de las zonas rurales; solo se acuerdan de ellas en elecciones. La universidad debe ser ese canal, formemos alumnos que empiecen a desarrollar esas redes”.
A partir de ese momento, la PUCP, en especial, nuestra carrera de Ingeniería de las Telecomunicaciones tiene una contribución tremenda al cierre de brechas de cobertura, al acceso y al uso de Internet en el país. ¿Cómo se lleva a cabo este aporte? Tanto la Red Dorsal Nacional de Fibra Óptica y los Proyectos Regionales, que hoy están en la mira de todo el Perú, nacieron en estas aulas, como trabajos prácticos y varias tesis de grado, que fueron los insumos básicos para formular estos grandes proyectos. Muchos alumnos y profesores han contribuido a estos desarrollos. Podríamos afirmar, si la miramos desde el punto de vista de Km. de fibra, que la PUCP ha contribuido con más del 50% de las actuales redes en el país. La industria privada sabe que un alumno de Telecomunicaciones de la PUCP es garantía de productividad inmediata; por eso, los actuales directivos de esta especialidad no cesan de mirar hacia adelante en la mejora continua, en el cambio sistemático y en la transformación digital de la carrera.
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